viernes, abril 06, 2007

Visitar París: más allá del fin de semana

Como complemento a la primera parte, en la que incluía las sugerencias básicas para el recorrido típico de un fin de semana parisino, en este artículo relato unas cuántas sugerencias más, orientadas a ocupar tu tiempo en el caso de que tengas la suerte de poder sobrepasar la exigua cantidad de dos días.
El orden en el que aparecen es completamente aleatorio, que cada cual lo establezca según sus gustos y sus preferencias.

.- Musée d'Orsay. El templo de los impresionistas. Si te gusta la pintura, y obviamente, el impresionismo, éste es tu museo. Tienen una colección acojonante: Van Gogh, Renoir, Matisse, Manet, Monet, Gaugin, Toulouse-Lautrec, etc. Por otra parte, el museo es realmente bonito. Una antigua estación de tren que han transformado muy inteligentemente para albergar las colecciones pictóricas de los maestros franceses de finales del siglo XIX, principios del XX. Una visita a este museo es casi obligada, y no te tomará mucho tiempo: a lo sumo un día (deteniéndote casi en cada cuadro), que no es nada si lo comparamos con una visita al Louvre. Te aconsejo también visitar la tienda del museo, tienen cosas interesantes para un regalo inesperado o como simple souvenir.

.- Centro Georges Pompidou. Museo de arte contemporáneo y biblioteca pública. Muy criticado en su momento, por su estética nada clasista, pero no deja de ser el lugar más visitado de París después del Museo del Louvre. Es guapo verlo por fuera, una especie de barco postmoderno. En la plaza, según qué día vayas y a qué hora, vas a encontrar mucho ambiente: artistas callejeros, pintores, gente rara... Una vez ví a un tipo, currándose una obra callejera con la participación del público y llegó a congregar a más de 150 personas. Cuando terminó, no puso un sombrero para recoger la pasta... puso un paraguas! Puedes entrar dentro, la planta baja es gratuita, a veces hay exposiciones, la última que he visto ha sido una conmemorativa de Tintin y su autor, Hergé. Si quieres subir a la azotea, hay que pagar, lo mismo que para ver las exposiciones de las plantas superiores. Para entrar en la biblioteca y ver así otra parte del edificio, tienes que entrar por la otra calle, la que no da a la plaza. También es curiosa la fuente que hay justo al lado del edificio, con varias estatuas (?) con mecanismos extraños que expulsan agua (lo siento, pero no encuentro una manera más apropiada de describir el invento).

.- Barrio Latino - Saint Germain. Estos dos barrios son 100% París. El primero es un barrio popular y universitario. Por cierto, ¿sabes por qué es Latino?... pues como todos, seguro que habrás pensado: "coño, porque está lleno de cubanos, mexicanos y colombianos moviendo el culo bailando salsa". Pues no. Se le llama Latino precisamente por la presencia de las universidades, por ejemplo, La Sorbona, en las cuales el idioma utilizado era el latín. Te recomiendo que te acerques paseando hasta el Pantheon y luego que bajes por la rue Mouffetard hasta el final. Esto es bonito hacerlo un sábado por la mañana, porque al final de la calle hay un montón de tiendas de comida (hay varias fromageries, por si quieres comprar el apestoso e insano alimento (?) llamado queso) y montan un mercado callejero, con mogollón de ambiente. Puede que en la plaza haya peña con un acordeón tocando sonidos puramente franceses y peña bailando. Depende del sábado, si te toca, suerte. Desde allí, aunque no está demasiado cerca, puedes acercarte hasta le Jardin de Plantes. Si eres un enamorado de la botánica, éste es tu parque.
Saint-Germain es un barrio más elitista. Casas de ensueño, con ventanales enormes, pasos de carruajes que dan lugar a patios interiores, calles jalonadas de galerías de arte y tiendas de objetos que te cuesta imaginar que alguien pueda comprar (salvo quien esté jodidamente podrido de pasta, claro). Puedes callejear por sus pequeñas rues y llegar a la iglesia de Saint-Germain des Près. Casi por detrás de la iglesia, hay una placita que es preciosa, muy pequeña, con un árbol en el centro. También, si eres un fan del Código Da Vinci, la iglesia de St Sulpice está cerca (es la iglesia donde el monje albino, brazo ejecutor del Opus, se carga a la monja). Si tienes tiempo, acércate a los jardines de Luxemburgo. Es un parque bastante bonito, sobre todo en verano. Es gracioso ver a medio París en los jardines, sentados o tumbados en centenares de sillas verdes de metal tomando el poco sol del que pueden gozar. Pensarán ponerse morenos con tres rayos de sol...

.- Arco de Triunfo - Champes Elysées. La glorieta del Arco de Triunfo es digna de ver, sobre todo si vas conduciendo tu coche y tienes los huevos suficientes como para aventurarte en su interior. Siguiendo la costumbre de París, no hay un puto carril marcado dentro de la glorieta, además de ser enorme (el radio de la circunferencia son unos diez coches). Sí, es un infierno, como la mayoría de las plazas circulares de París. Hay algunas en las que el que va dentro cede el paso al que entra, y eso sin la presencia de un semáforo. Algo inaudito en Madrid, por ejemplo. Se puede subir al Arco, pero si pretendes subirte a todos los monumentos que lo permiten, te vas a gastar una pasta, vas a hacer más colas que un tonto, y vas a terminar por tener una vista similar, así que... tú mismo.
El paseo que te recomiendo es partir del Arco y bajar hasta la Place de la Concorde. Es preferible hacerlo así para evitar a tu piernas hacer lo contrario: subir. Ve por la acera de la izquierda, que es la más grande, la más soleada y la más animada. Creo que son algo más de dos kilómetros. A la mitad de camino, párate, ponte a cruzar la calle y quédate en la mitad de la calzada: tendrás una perspectiva similar a la que yo tuve el día de Nochevieja de este mismo año. Fue la hostia, sí, pero fue también decepcionante: mucha gente pero casi nada de ambiente, más que una fiesta parecía un funeral. Un poco más abajo, en la acera de la derecha, está el edifico de Louis Vuitton. Ojito con acercarse sobre todo si tienes un instinto consumista compulsivo. Hasta el llavero más insignificante puede valer una pasta insultante.

.- Le Marais. Es le quartier de moda. Se dan cita en él varias comunidades, entre ellas la homosexual. Viene a ser el Chueca parisino, aunque salvando las distancias. Es un barrio lleno de caserones increíbles y de palacetes. Si te acercas a la parte judía, verás varias sinagogas y puede que te cruces con algún que otro judío ultraortodoxo, con su traje negro y sus "tirabuzones". Durante la Nuit Blanche del año pasado fue el barrio con más actividades y, por tanto, con más afluencia de visitantes. Me sorprendió encontrar a tanta gente a las 3:00 de la mañana en la calle, no es lo habitual (bueno, Madrid es caso aparte). Sin lugar a dudas, es un barrio para pasear.

.- Haussmann - G. Lafayette - Opera - Vendome. En una zona plagada de oficinas encontrarás les Galeries Lafayette, el Corte Inglés francés. Merece la pena al menos entrar en el primer edificio, el principal. Por dentro es impresionante. Si tienes curiosidad por lo gastronómico, te recomiendo que te acerques al otro edificio, el de Moda Hombre, y visites la planta Gourmet. A mí me parece la hostia la cantidad de comidas diferentes que pueden ofrecer. Tiene un rincón español, por si te entra morriña. Saliendo de los grandes almacenes y cruzando el boulevard llegaréis a la Opera Garnier. El edificio no tiene desperdicio y menos aún lo tendrá por dentro, eso seguro, pero mis ojos no lo han visto. Al menos merece la pena verlo por fuera. Bajando un poco, puedes coger la rue de la Paix. Aquí, si te gusta el lujo, estarás en el Edén: la calle de Cartier, Dior, Chanel, etc. Desemboca en la place Vendome. Es la plaza donde está el hotel Ritz. La plaza es bonita, con su columna en el medio.

.- Sainte-Chapelle. No la he incluido entre las primeras alternativas porque a mí realmente no me impresionó tanto. Es bonita, cierto, pero después de cinco minutos contemplando las mismas vidrieras te preguntas qué puedes hacer para amortizar la pasta que vale la entrada. También pesa en mi opinión el modo en que desarrollé la visita: fue un día en el que vinieron a visitarme dos colegas, Antonio y Oscar. Ambos, cegados por la visión del putrefacto alimento, decidieron comprar un par de quesos por la mañana, un roquefort y otro aún más hediondo, quesos que tuvieron a bien endosarme por ser el único de los tres que llevaba un bolso. Pues bien, a la hora a la que realizamos la visita, los putos quesos olían como una congregación de mofetas. Después de unos minutos admirando las vidrieras, opté por sentarme en una silla, situándose a mi izquierda un tío y a mi derecha una pareja. Fue sentarme, olerme, mirarme y levantarse... todo en el mismo segundo. Imagínate el panorama. Nadie se quería sentar a mi lado. Normal... yo tampoco lo hubiera hecho.

.- Ile de la Cité et Ile Sant-Louis. Las dos islas más importantes de París. En la primera es donde está Notre-Dame, Sainte-Chapelle y la Conciergerie. La segunda es más pequeña, pero tiene casi más encanto, al no haber edificios institucionales en ella. Dar un paseo por ambas islas y pasar de una a otra por el puentecito que las une tiene su punto. Suelen haber artistas callejeros que se sitúan justo en el puente. También puedes cruzar el Sena por el Pont Neuf, el que dicen que es el más bonito de París. Cruza de una ribera a otra del Sena justo por la punta de la Ile de la Cité.

.- Les Halles - Rue Montorgueil. Ambiente parisino por los cuatros costados vas a encontrar por esta calle que sale de la plaza de Les Halles. Bastantes garitos, tiendas y restaurantes. Si vas entre semana, puede que veas más ambiente que un fin de semana. Es lo que dan las tiendas y los mercados abiertos...

Y aquí termina la lista. Es evidente que habrá gente que eche en falta muchas cosas: el Museo Rodin, el barrio chino de Belleville, La Bastille, Le Jardin de Plantes, La Défense, la Basílica de St. Denis, Las Catacumbas, etc. pero tampoco tengo intención de hacer una Charly Planet o un CharlyMundos. Para eso ya están las originales. Además, es imposible verlo todo. Habría que vivir en la ciudad y, por mi propia experiencia, eso no es algo que recomiende con entusiasmo.

Que lo pases pirata.

2 Comentarios:

At 13 abril, 2007 11:53, Blogger Fewzi said...

Alors tu as pris le temps de visiter Paris après ton départ?
Il est vrai qu’on a jamais le temps de le faire quand on y vie.
Mais tu as fait le tour. Moi je suis toujours impressionné lorsque je visite le musé d’Orsay. Ce n’est pas pour rien qu’on les appels les impressionnistes 
Les tableaux de Renoir... une merveille. Je pense que tu as oublié Edgar Degas (tableaux sur les danseuses).

Tu vas nous faire la comparaison avec Toulouse ? haha 
J’ai découvert un café sympa au centre de Toulouse. Il s’appel :
« L'Autre Salon de Thé » 45 r Tourneurs 31000

A+

Fewzi.

 
At 17 abril, 2007 10:42, Blogger Carlos M. said...

Oui, en effet c’est bizarre de faire ça une fois que j’ai quitté la ville.
Par rapport à Toulouse… laisse moi un peu plus de temps et tu pourras voir un vrai toulousain ;-)

Il faudra visiter ce salon, je te dirai.

À bientôt, mon ami

 

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